La leishmaniosis en los perros

¿Qué es la leishmaniosis canina?

Se trata de una peligrosa enfermedad transmitida por la picadura de flebótomos, pudiendo causar incluso la muerte del animal.

¿Durante que época debe prestarse especial atención?

A pesar de que existe mayor peligro durante los meses de calor hasta octubre, es importante tener en cuenta que existe riesgo de contagio durante todos los meses del año, por lo que es muy recomendable que el perro esté siempre protegido con antiparasitarios como collares impregnados con deltametrina o pipetas repelentes.

¿Cómo detectar si nuestro perro está infectado?

La variedad de síntomas es innumerable, puesto que dependen de los órganos que resulten afectados. Además, a esto hay que sumarle que no todos los perros infectados con leishmania desarrollan la enfermedad ni tienen las mismas lesiones: mientras que algunos no lo demuestran nunca, otros tienen lesiones que afectan a sus órganos vitales desencadenando consecuencias fatales.

Entre los síntomas más frecuentes se pueden encontrar:

                - lesiones oculares como conjuntivitis

                - lesiones articulares o inflamaciones que pueden derivar en cojera

                - atrofia muscular especialmente en la zona de la cara

- lesiones en la piel como úlceras en las orejas, extremidades y borde de las orejas.

                - problemas renales

                - sangre en la orina

                - crecimiento exagerado de las uñas

                - diarreas

                - pérdida del apetito y de peso

                - aumento del tamaño de los ganglios linfáticos (en el cuello y en la parte interna de las patas).

¿Existe tratamiento contra la leishmaniosis?

Sí que existe tratamiento, pero éste es lento, complejo, crónico y costoso. Por este motivo la forma más sencilla y barata es proteger frente a la picadura colocando los ya mencionados productos antiparasitarios.

No obstante, dado que cada animal reacciona de forma distinta, si sospechas que tu mascota puede estar infectada, te recomendamos que consultes cuanto antes con tu veterinario de confianza para que pueda examinarla.